Historia del Escultismo en Ecuador

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En el año de 1912, el entonces cónsul ecuatoriano en El Havre (Francia) Sr. Dn. Cristóbal Vela, enterado del nuevo Movimiento surgido en Inglaterra, emprendió, con recomendable celo, una loable campaña para que se establecieran los Boy Scouts en el Ecuador. Muy pronto halló eco su voz en la persona de destacados periodistas y ciudadanos prestantes de Quito y Guayaquil.

Ya para 1913 se organizaba en Guayaquil el Primer Comité Escultista, presidido por el Sr. Dn. Virgilio Drouet, estableciéndose las primeras "brigadas de Boy Scouts" de la Sociedad Filantrópica del Guayas, de la Sociedad “Hijos del Trabajo” y del Colegio de Internos "Francisco Campos".

En el mismo año de 1913 se constituía, más tarde, el Primer Comité Nacional de Scouts, teniendo como Presidente al Sr. Dn. Carlos Gómez Rendón; como Vicepresidente al Sr. Dn. Vicente de Santistevan; como Secretario al Sr. Dr. Carlos Monteverde; y como Tesorero al Sr. Dn. Francisco García Avilés; y como Vocales al Sr. Crnel. Velasco Polanco y al Sr. Crnel. Geo Chambers Vivero. En tanto, en el cantón Daule surgía un vigoroso Comité Escultista, presidido por el Dr. Felipe S. Vargas y contando como instructor al Sr. Dn. Carlos Matamoros Jara.

Estas primeras agrupaciones no lograron cristalizar de inmediato en una Institución completamente organizada, pero sirvieron de base para que el 26 de marzo de 1920 se constituyera, en forma definitiva, la ASOCIACIÓN NACIONAL DE BOY SCOUTS DEL ECUADOR, con Estatutos reconocidos por el Gobierno Nacional y con la respectiva afiliación a la Oficina Scout Internacional de Londres. Más tarde tomaría el nombre oficial de Asociación de Scouts del Ecuador.

El primer Presidente de la Asociación así formada fue el infatigable promotor del Escultismo ecuatoriano Dn. Carlos Matamoros Jara. Lo acompañaban, integrando el Comité Ejecutivo Nacional, los señores José Chávez Mata, Alberto Wither Navarro, Carlos Matamoros Jr., Francisco Campos R., Dr. José Vicente Trujillo, Dr. Manuel Gómez A., Alfredo Sanz y Pedro Martínez Guerrero.

Desde esa fecha el Escultismo en el Ecuador ha avanzado con tesón, superando la adversidad de un medio en fase de estructuración, brindando a la niñez y la juventud ecuatoriana un sendero amplio y limpio para el desarrollo y formación integrales de su carácter.

En reconocimiento a esta labor tan abnegada, el Gobierno Nacional confirmó definitivamente Personería jurídica a Nuestra Asociación por Decreto Ejecutivo, el 6 de febrero de 1956.

El 31 de julio de 1963, el Movimiento Scout Ecuatoriano fue declarado “DE UTILIDAD PÚBLICA Y CON RECONOCIMIENTO OFICIAL” por parte de la máxima autoridad gubernamental. En 1966 se sistematizó debidamente el P.O.R (Principios, Organización y Reglamento) que está en vigencia para los Scouts del Ecuador.

En 1968, el Ministerio de Educación Pública acordó hacer obligatoria la formación de Grupos Scouts en todas las Escuelas y Colegios del País mediante el programa Flor de lis, Escultismo para Jóvenes” (FLEJ).

Tal ha sido la trayectoria limpia y gloriosa del Escultismo ecuatoriano. Los Scouts del Ecuador han estado siempre listos para servir en los casos en que su presencia ha sido requerida, auxiliando al necesitado, sirviendo a la comunidad, colaborando en la dirección del tránsito en las ciudades y en el mantenimiento del orden público, y, al mismo tiempo, capacitándose cada día más para integrar el gran contingente de buenos ciudadanos ecuatorianos que se aprestan a ser los arquitectos de un mañana mejor.

Fuente

  • Mi segunda clase. Asociacion de Scouts del Ecuador

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